Si no tienes claro cuáles son tus patrones de sueño, puede resultar interesante hacer un seguimiento y análisis del mismo para poder mejorarlos.  

Puedes registrar manualmente algunos parámetros,  como la hora de irte a la cama, las veces que te despiertas y su duración, etc., pero también puedes utilizar un dispositivo de los múltiples  y diferentes opciones que existen.

Estos dispositivos monitorizan automáticamente el sueño y además de darte una visión más precisa, de los datos, (por ejemplo las horas reales de sueño no siempre coinciden con la percepción subjetiva); ofrecen datos como ritmo cardiaco, porcentaje de tiempo en  sueño ligero, profundo y REM, gráficos, recomendaciones, etc. 

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Puede resultar útil conocer si se están realizando todos los ciclos necesarios y la duración de cada una de las fases, ya que por ejemplo durante las fases 3 y 4 se produce el sueño que nos permite "levantarnos y sentirnos genial". Y por ejemplo las carencias de sueño RE.M se asocian con problemas de memoria.

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Los dispositivos de medición de fases de sueño, permiten llevar un tracking de los ciclos y de cada fases. Conocer si se está produciendo alguna carencia, es el primer paso para poder incorporar las medidas adecuadas para corregirlo.

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Entre los distintos sistemas disponibles, se encuentran los anillos, como Oura, las pulseras de actividad como Fitbit, aplicaciones móviles como la gratuita Sleep Cycle que además de monitorizar tu sueño con el móvil, cuenta con alarma inteligente, que te despierta, dentro del rango horario que tu elijas, en el momento que sea menos disruptivo para tu ciclo de sueño.

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Es importante tener en cuenta, que no todos los dispositivos ofrecen datos fiables.  Infórmate bien antes si vas a adquirir alguno.  

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También debes saber que en ocasiones, el uso inadecuado u obsesivo de los mismos puede producir Orthosomnia.